domingo, 17 de mayo de 2015

EL COLEGIO IMPERIAL DE LOS NIÑOS DE SAN VICENTE



Años 40 - Muchas son las huellas que el dominico valenciano ha dejado sobre la ciudad de Valencia, tanto en cuanto sus diversas facetas de hombre devoto, intelectual comprometido, político mediador, milagrero, apocalíptico y protector de la infancia. Aspecto este último en el que hacemos hincapié en esta ocasión.

Con el largo, como su historia, nombre de Colegio Imperial de Niños Huérfanos de San Vicente Ferrer, se conoce a esta institución que allá por 1410 tuvo sus primeros días por iniciativa del futuro santo, en su atención a los niños abandonados. La idea del “Pare Vicent”, necesitada de una sede, se alojó en la Casa de los Beguines, hospicio próximo al Convento de San Agustín, que se dedicaba al cuidado de los niños huérfanos, así como los moriscos sin cobijo. Colegio que iba a tener el beneplácito años después del emperador y rey de España, Carlos I, cuyo apoyo queda explícito en su nombre, al igual que los sucesivos monarcas quienes mantuvieron su ayuda.
  
Hasta 1968 estuvo situado el colegio en la calle Lauria; año en el que por su hundimiento se viera obligado al traslado de los niños a una colonia de verano próxima al pantano del Generalísimo, y al amparo de Cáritas Diocesana.

Y así estuvo prestando su servicio, hasta su traslado definitivo a la localidad de San Antonio de Benageber en unas nuevas instalaciones que fueron inauguradas en 1977, donde el Colegio sigue prestando ayuda a quienes la necesitan, manteniendo el espíritu de San Vicente Ferrer tras los muchos siglos de su existencia.

1 comentario:

  1. Yo creo que fui a la escuela en ese colegio entre los años 1944- 1948, creo que hacia chaflán entre calle Lauria y calle Colón,me trae bonitos recuerdos

    Un saludo

    José

    ResponderEliminar